El Real Madrid certificó su
clasificación para la última ronda previa de la Liga de Campeones
femenina, tras imponerse este domingo por 0-1 a un Manchester City, que
como ya ocurrió el pasado año volvió se vio apeado de la máxima
competición continental por el conjunto blanco en las rondas
preliminares.
Si la pasada campaña la clasificación del equipo
español pudo considerarse inesperada, en esta ocasión el Real Madrid se
hizo claro acreedor del billete, tras superar por completo a su rival en
la primera mitad y saber sufrir con oficio en el segundo tiempo.
El
pasado jueves ante el Sturm Graz el Real Madrid no dudó en ir a buscar a
su propia área al conjunto austríaco. En esta ocasión las de Alberto
Toril, conscientes de la calidad del equipo inglés en la salida del
balón, retrasaron unos metros la línea de presión.
Una circunstancia que permitió al Manchester City adueñarse de partida de la posesión del esférico.
Pero
si el balón fue del conjunto "citizen", las ocasiones del Real Madrid,
que apenas superados los primeros nueve minutos de juego ya
contabilizaba dos claras oportunidades para haberse adelantado en el
marcador.
Un ataque continuo, facilitado por el cansancio de las jugadores
locales, que a punto estuvo de dar sus frutos a los 80 minutos en un
remate de la exjugadora del Atlético de Madrid, la venezolana Deyna
Castellanos que se estrelló en el poste.
Agonía que se pareció
acabar con la entrada al terreno de juego de Maite Oroz y Tere
Abelleira, que dieron nuevos bríos al Real Madrid, que en los minutos
finales dispuso de dos inmejorables ocasiones para sentenciar la
contienda en la figura de Esther, que envió un balón al larguero.
Un
segundo tanto que finalmente no le hizo falta al conjunto blanco para
superar la eliminatoria y dejar fuera de la Liga de Campeones a un
Manchester City, que volvió a tropezar en las preliminares ante el Real
Madrid. Un ataque continuo, facilitado por el cansancio de las jugadores
locales, que a punto estuvo de dar sus frutos a los 80 minutos en un
remate de la exjugadora del Atlético de Madrid, la venezolana Deyna
Castellanos que se estrelló en el poste.
Agonía que se pareció
acabar con la entrada al terreno de juego de Maite Oroz y Tere
Abelleira, que dieron nuevos bríos al Real Madrid, que en los minutos
finales dispuso de dos inmejorables ocasiones para sentenciar la
contienda en la figura de Esther, que envió un balón al larguero.
Un
segundo tanto que finalmente no le hizo falta al conjunto blanco para
superar la eliminatoria y dejar fuera de la Liga de Campeones a un
Manchester City, que volvió a tropezar en las preliminares ante el Real
Madrid.
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