Inundaciones en Apure y Portuguesa dejan 53.000 afectados y pérdidas masivas - Radio America VE
planeta tierra girando circulo logo radio america ve

Volumen:

100

Últimas noticias

jueves, 17 de julio de 2025

Inundaciones en Apure y Portuguesa dejan 53.000 afectados y pérdidas masivas

RadioAmericaVe.com / Nacionales.

Más de 53 mil afectados por lluvias en Venezuela es el nuevo saldo alarmante que deja la temporada de precipitaciones, con zonas rurales y urbanas completamente anegadas, pérdidas materiales y un Estado ausente. A medida que se intensifica el fenómeno climático, las cifras de damnificados y desplazados siguen aumentando, sin respuestas efectivas por parte del gobierno.

Crisis agrícola y humanitaria crece en Apure, Portuguesa y los Andes.

Las lluvias registradas en el sur y oeste de Venezuela han derivado en una **emergencia nacional por inundaciones**. En el estado Apure, más de 53.000 personas han sido afectadas y cerca de 7.000 viviendas se encuentran anegadas. Adicionalmente, en Portuguesa los productores estiman una pérdida del 80 % de la superficie cultivada, mientras que en los Andes Fedeagro reporta al menos 150 hectáreas destruidas. La magnitud del desastre expone fallas graves en infraestructura y gestión del riesgo.

Devastación agrícola en Venezuela: más de 53 mil afectados por lluvias arrasan el campo

Venezuela está bajo el agua. Más de 53.000 personas afectadas y una catástrofe agrícola sin precedentes golpean con furia al corazón productivo del país.

Las lluvias que azotan a Venezuela han desencadenado una tragedia que no solo afecta viviendas y familias, sino que también compromete directamente la seguridad alimentaria de millones. El Estado Apure reporta más de 7.000 casas anegadas y una emergencia que no cesa. En paralelo, los productores del Estado Portuguesa advierten que el 80% de la superficie sembrada se ha perdido. Y desde Fedeagro se alerta que al menos 150 hectáreas quedaron destruidas en la región andina.

Apure bajo el agua: crisis humanitaria en crecimiento

El Estado Apure, uno de los más afectados por las lluvias torrenciales, se encuentra en estado crítico. Según reportes oficiales, más de 53.000 personas han sido directamente impactadas, con sus hogares completamente inundados, sin acceso a agua potable, ni electricidad, ni alimentos. Las calles se han transformado en ríos, las escuelas están cerradas y las autoridades no dan abasto.

“No hay comida ni manera de salir de la zona. Estamos atrapados”, declaró a Vierne5 una habitante de Guasdualito que pidió mantenerse en el anonimato por miedo a represalias. Las imágenes satelitales muestran un panorama desolador, con extensas zonas rurales completamente cubiertas por el agua.

Portuguesa: el colapso del motor agrícola

Mientras Apure lucha contra el agua en las calles, Portuguesa —considerado uno de los pulmones agrícolas de Venezuela— sufre el colapso de su sistema productivo. Productores locales estiman que hasta un 80% de la superficie cultivada se ha perdido. Los cultivos de maíz, arroz y leguminosas, pilares esenciales de la dieta venezolana, han sido arrasados.

“Nunca habíamos visto algo así. Sembramos con esperanza y ahora lo perdimos todo”, explicó Juan Delgado, agricultor de Acarigua. Las pérdidas económicas son incalculables. La falta de canales de drenaje, el abandono del sistema de riego y la ausencia de asistencia técnica agravan la crisis. Las lluvias se convirtieron en el golpe final a un sistema ya herido por años de abandono gubernamental.

¿Y el gobierno? Entre la improvisación y el silencio

Hasta ahora, la respuesta oficial ha sido, según los afectados, insuficiente y tardía. Los pocos esfuerzos de asistencia se han limitado a promesas de reconstrucción, entrega de colchonetas y cajas CLAP, sin atacar el problema estructural. La falta de mantenimiento de represas, diques y canales de drenaje ha transformado las lluvias en una sentencia para cientos de miles de venezolanos.

En la segunda parte de este reportaje especial abordaremos el impacto en la región andina, las alertas de Fedeagro, las consecuencias en los precios de los alimentos y el análisis del riesgo nacional en términos de seguridad alimentaria. Además, propondremos soluciones y exigencias ciudadanas para atender de forma estructural esta emergencia.

Región andina en emergencia: 150 hectáreas afectadas

En los Andes venezolanos, Fedeagro confirmó que al menos 150 hectáreas de tierras productivas fueron arrasadas por lluvias intensas. Las precipitaciones destruyeron cultivos de papa, tomate y hortalizas, agravando la escasez de alimentos básicos en zonas urbanas y rurales. Productores reclaman apoyo urgente, y advierten que si no se actúa, el fenómeno se repetirá cada año con efectos más severos.

Impacto económico y alza de precios

La devastación agrícola se traduce directamente en inflación de alimentos. Según análisis de mercados locales, los precios del maíz y la yuca han subido entre un 15% y un 25% en solo semanas. El bolsillo de las familias venezolanas está bajo presión. Además, los intermediarios aprovechan la escasez y especulan, lo que encarece aún más productos esenciales.

Seguridad alimentaria en riesgo

Cuando la producción agrícola cae de forma abrupta, se produce una cadena de efectos: menos alimentos disponibles, aumento de importaciones y mayor vulnerabilidad social. En consecuencia, la dependencia de productos importados —sometidos por el tipo de cambio— podría negarse o encarecer aún más, dejando a amplios sectores sin acceso a alimentos saludables.

Fallas estructurales y abandono sostenido

La tragedia no es fortuita: refleja años de abandono y falta de inversión en infraestructura. Canales de riego en ruinas, drenajes insuficientes y presas sin mantenimiento dejaron al campo expuesto. Además, la descentralización de recursos ha sido lenta, lo que impide que gobernadores y alcaldes desarrollen soluciones oportunas.

Historias detrás de los números

“Perdí medio ciclo de producción. Mi familia no sabe si comemos mañana”, cuenta María Pineda, agricultora de Mérida. Su testimonio resuena con el de cientos que, tras décadas de trabajo, enfrentan la ruina. Estas historias revelan el rostro humano de una crisis que amenaza con profundizar la migración interna y rural.

Propuestas urgentes y estructurales

  1. Rehabilitación inmediata de infraestructura: reparar canales, diques y drenes antes de la próxima temporada.
  2. Fondos de emergencia regionales: dotar a gobernaciones con recursos disponibles y de ejecución rápida.
  3. Monitoreo meteorológico local: implementar estaciones hidrometeorológicas y alertas comunitarias.
  4. Apoyo técnico a pequeños productores: entregar semillas mejoradas, asesoría agronómica y asistencia post-desastre.

Editorial: la encrucijada del campo

Venezuela enfrenta una doble crisis: humana y estructural. Los efectos de las lluvias son claros, pero lo grave es que no hay lección para el futuro. Este desastre reveló una falla mayor: la ausencia de un plan agrícola de largo plazo. Si seguimos esperando reacciones, no serán las lluvias, sino la inacción, lo que nos anegará el futuro.

También te puede interesar

¿Qué opinas? Escríbenos a [email protected]. Tu voz también cuenta.

RadioAmericaVe.com / Nacionales.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Pages