Auditoría del poder en Venezuela: un nuevo control ciudadano - Radio America VE
planeta tierra girando circulo logo radio america ve

Volumen:

100

Últimas noticias

miércoles, 22 de octubre de 2025

Auditoría del poder en Venezuela: un nuevo control ciudadano

RadioAmericaVe.com  / La Voz Del NIN

 

La auditoría del poder en Venezuela se convierte en una urgencia moral y política para frenar la impunidad y recuperar la confianza pública.

La auditoría del poder en Venezuela dejó de ser un ideal teórico para convertirse en una urgencia moral y política. El país necesita mecanismos reales de control que vayan más allá del discurso y se traduzcan en acciones concretas que impidan la impunidad y la manipulación institucional. Porque auditar el poder no es un acto técnico: es un deber ciudadano.

Durante años, los venezolanos han visto cómo las instituciones fueron secuestradas por el mismo poder que deberían vigilar. La ausencia de contrapesos convirtió la gestión pública en un espacio opaco, donde los abusos se ocultan tras decretos, favores y lealtades. Hoy, frente a un país agotado, surge una pregunta inevitable: ¿cómo se audita a quienes gobiernan sin temor ni complacencia?

Auditar al poder: una deuda histórica con la democracia

En toda república verdadera, el control del poder es la base de la libertad. Pero en Venezuela, ese principio fue sustituido por la obediencia política. El resultado: un Estado hipertrofiado, donde los organismos de control son piezas de un mismo engranaje autoritario. Sin independencia, no hay fiscalización; sin fiscalización, no hay justicia.

El concepto de auditoría del poder no se limita a revisar cuentas o presupuestos. Implica evaluar la legalidad, la ética y la eficiencia de cada decisión pública. Supone examinar la conducta de los funcionarios, la transparencia de los contratos, la trazabilidad del gasto público y la correspondencia entre lo prometido y lo ejecutado.

“El poder que no se audita se corrompe, y el pueblo que no participa se convierte en cómplice”, afirma Víctor Escalona. Y tiene razón: la democracia se debilita cuando los ciudadanos dejan de exigir rendición de cuentas y aceptan la mentira como parte del paisaje político.

Los nuevos mecanismos de auditoría ciudadana

En la era digital, los ciudadanos cuentan con herramientas inéditas para auditar al poder. La tecnología permite romper los monopolios de la información y exponer los abusos que antes quedaban en silencio. De ahí que el reto no sea la falta de medios, sino la falta de voluntad colectiva para usarlos.

1. Plataformas digitales de transparencia

En varios países de América Latina, portales abiertos de datos permiten a los ciudadanos revisar presupuestos, licitaciones y compras públicas. En Venezuela, un mecanismo similar podría revolucionar la rendición de cuentas. Un sistema en línea, autónomo y auditable por universidades y ONG, sería un primer paso para devolver la confianza.

2. Observatorios independientes

Organizaciones civiles, académicas y periodísticas deben constituir observatorios que publiquen reportes trimestrales sobre el uso de recursos públicos. Estos observatorios actuarían como un espejo ético frente al poder, una voz documentada que impida el silencio cómplice del Estado.

3. Auditoría social directa

El ciudadano común puede convertirse en auditor cotidiano. Registrar, denunciar, compartir información y exigir respuestas son actos de auditoría social. No se trata de espionaje, sino de vigilancia cívica. Cada acción documentada, cada irregularidad expuesta, es un ladrillo en la reconstrucción de la verdad.

“A veces, el verdadero cambio no empieza en la calle, sino en lo que decides pensar cada mañana.” — Víctor Escalona

El poder que no rinde cuentas se vuelve ilegítimo

El poder no se corrompe solo por la ambición, sino por la falta de control. Cuando los funcionarios se sienten intocables, el abuso se vuelve rutina. Las auditorías independientes son, por tanto, una garantía de legitimidad. No se trata de desestabilizar al Estado, sino de devolverle credibilidad.

En países como Chile, Uruguay o España, los organismos contralores funcionan con independencia y están sometidos a auditorías externas. En Venezuela, en cambio, los órganos de control dependen jerárquicamente del Ejecutivo. Es como pedirle al lobo que vigile el gallinero.

Por eso urge crear una arquitectura institucional donde las contralorías, los tribunales y las fiscalías rindan cuentas ante el ciudadano, no ante el partido. Solo así el Estado podrá dejar de ser un botín y volver a ser una casa común.

El papel de la sociedad civil y los medios

El control del poder no es tarea exclusiva del gobierno ni de la oposición. Es una responsabilidad de todos. Las universidades, los sindicatos, las asociaciones vecinales y los medios deben actuar como contrapesos activos. En esta nueva etapa, la prensa libre se convierte en el primer auditor del poder.

Los medios digitales, como Vierne5, tienen una misión ética: exponer los hechos con rigor, sin temor y sin militancia partidista. La transparencia no se impone por decreto, se conquista con información verificable y ciudadanos conscientes.

“La verdad es el único poder que no necesita escoltas”, sentencia Víctor Escalona, recordando que ningún régimen puede sostenerse indefinidamente sobre la mentira.

Ejemplos de mecanismos exitosos en la región

  • Chile: el portal “ChileCompra” permite seguir en tiempo real cada gasto público.
  • Colombia: las veedurías ciudadanas tienen rango constitucional y auditan proyectos comunitarios.
  • México: el INAI garantiza el acceso a la información pública de cualquier ciudadano.
  • España: la Ley de Transparencia obliga a publicar presupuestos, subvenciones y sueldos públicos.

Estos ejemplos demuestran que el control no es una amenaza para el poder, sino una herramienta para legitimarlo. La transparencia fortalece al Estado porque lo obliga a ser eficiente, ético y responsable.

Preguntas frecuentes sobre la auditoría del poder en Venezuela

¿Por qué es necesaria una auditoría del poder?

Porque sin control ciudadano, el poder se desvirtúa. La auditoría evita abusos, mejora la gestión pública y fortalece la democracia.

¿Qué papel puede jugar la tecnología?

Las plataformas digitales pueden permitir auditorías en tiempo real, publicando contratos, sueldos y gastos públicos accesibles a todos los ciudadanos.

¿Cómo puede participar la sociedad civil?

Creando observatorios, denunciando irregularidades y exigiendo transparencia en cada nivel del Estado. La participación ciudadana es el núcleo del cambio.

También te puede interesar

Un poder transparente para un país digno

El futuro de Venezuela no depende solo de un cambio político, sino de una transformación ética. Auditar al poder es auditar el alma de la nación. Es decirle a los gobernantes que la soberanía no se mendiga ni se compra: se ejerce con integridad.

Si el pueblo se convierte en auditor permanente, ningún tirano podrá seguir mintiendo impunemente. Y cuando la transparencia deje de ser una consigna para convertirse en una cultura, entonces Venezuela volverá a ser libre.

¿Qué opinas? Escríbenos a [email protected]. Tu voz también cuenta.

RadioAmericaVe.com / La Voz Del NIN

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Pages